FERNANDO ORTIZ
CABALLERO VEITICUATRO
Los restos de Arguijo descansan cerca de la
tumba de Béquer, ante la que tantas veces
meditó Cernuda.
Envuelto en negra capa,
a la hora que las campanas con grave asombro
advierten la caída de la tarde,
camina el caballero como sombra
por calles donde el viento se pierde en los adarves.
¿Irá a la Iglesia de la Compañia,
a la conversación discreta de unos pocos,
el comento y lectura de unos versos latinos
donde hallar el sosiego
que enturbian comerciantes, notarios, acreedores ?
¿Dónde va el caballero
con paso que se alza sobre el gris de las horas?
Allá, allá lejos;
donde no existe olvido,
junto a su hermano en la melancolía,
a cumplir su destino más secreto y más libre.
xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxx
CAVALEIRO VINTE E QUATRO
Os restos mortais de Arguijo descansam perto do túmulo
de Bécquer, diante do qual tantas vezes meditou
Cernuda.
Envolto em negra capa,
à hora em que os sinos com grave assombro,
avisam a queda da tarde,
caminha o cavaleiro como sombra
por ruas onde o vento se perde nos adarves.
Foi à Igreja da Companhia,
à conversa discreta de uns poucos,
ao comentário e leitura de una versos latinos
onde encontrar o sossego
que perturbam comerciantes, notários, credores?
Onde vai o cavaleiro
com passo que se levanta sobre o cinzento das horas?
Acolá, acolá longe;
onde não existe esquecimento,
junto ao seu irmão em melancolia,
a cumprir o seu destino mais secreto e mais livre.
Sem comentários:
Enviar um comentário